Por el Día de la rosa, queremos presentarles la historia del más grande amor de Napoleón Bonaparte, la cual empezó en el otoño de 1795 y quien obtuvo todas las variedades de rosa del mundo en plena Guerra Fría.
Ella fue la vizcondesa de Beauharnais, su nombre era Marie Josephe Rose Tascher de La Pagerie, conocida como “Rose” hasta que Napoleón – debido a que muchos de sus amantes la habían llamado así – decidió nombrarla Josephine.
Josephine, debido a sus conexiones sociales conoció a Napoleón Bonaparte con quien contrajo matrimonio dos años después de que su primer esposo falleciera bajo la guillotina. En 1804 es coronada emperatriz de Francia por su segundo y último esposo, Napoleón.
Mientras Napoleón estaba en Egipto en el año 1799, Josephine compró un gran castillo en Malmaison, en donde diseñó un jardín al estilo inglés, llevó jardineros talentosos, quienes se encargarían de las plantas y rosas. Ella quiso adquirir todas las variedades de rosas en el mundo mientras había una inmensa tensión de Guerra Fría en todo Francia, por eso, solicitó la ayuda de su poderoso esposo, quien había incautado las embarcaciones que fueros importados en Francia.
En su jardín habían alrededor de 250 tipos de diferentes rosas en Malmaison, en donde agregó pequeñas notas informativas con las variedades que adornaron el jardín. Las dominantes fueron las rosas Gallicas que tenían más de 150 cultivares diferentes en la colección.